Por tan sólo unos instantes fuiste mío
y tus dulces brazos cobijaron mi frío,
en mi corazón dibujaste dulce ilusión
llenando mi alma de tierna sensación.
Fuiste mío... se lo dije a la bella luna,
recordé tus suaves caricias una a una,
eran tus versos cual suave manantial
reflejándome en ellos cual dulce sitial.
Me llenaste de tus risas y de tu ternura
y fugaz viví contigo un mundo de locura,
hoy las dudas se han clavado en mi alma
dejándome melancólica triste y sin calma.
En algún instante mágico sentí que tenía
entre mis brazos ese amor que yo pedía,
ese alguien que me brindara el consuelo
y hoy... solo elevo mi mirada a ese cielo.
Y quisiera decirte ¡ Abrázame fuerte amor !
Quita de mi corazón, tanta duda y dolor,
envuélveme en la calidez, de tu ternura,
porque esta triste sensación en mí perdura.
Este amor callado, me lleva a ese sendero
en donde se va perdiendo el dulce te quiero,
mirándote a los ojos te digo cuánto te amo
y nota en mis labios el beso que hoy reclamo.
¡ Dáme la seguridad de saber que es sincero
este dulce sentimiento que será perecedero !
Dale paz a mi alma, devuélvele la felicidad
porque mi alma tiene dudas y tú la realidad.