Yo quisiera tener un cofre lleno de mucho amor, sabiduría, paciencia y tolerancia... para poder ofrecerlo, en verdadera amistad, a quien pueda necesitarme.
Ofrecer mi mano sin condición para ayudarte a llevar lo que a solas no puedes, estar allí siempre que necesites ser escuchado. Mi hombro para cuando quieras llorar, mis pies para que te acompañen a donde quiera y pueda caminar junto a ti.
Mis consejos por si pueden hacerte reflexionar y mi amistad incondicional sin limite de horario ni de tiempo, porque no te quiero para que resuelvas mis problemas ni para ser una carga para ti, ni aprovecharme de tus sentimientos, ni causarte daño alguno…
Sólo quiero que emprendamos este camino de la vida llamada amistad y que juntos este tesoro podamos compartir; te espero con los brazos abiertos y las puertas, no sólo de mi casa sino de mi corazón, para ti que deseas lo mismo que yo.
Y que nunca te falten los amigos sinceros, que siempre puedas contar con ellos. Los amigos son piezas importantes de nuestras alocadas y errantes vidas, siempre hacen falta cuando se pierde el rumbo, así pues, que siempre encuentres una voz amiga que sepa guiarte en este caminar por la vida…
Piensa que todo este mes del amor y la amistad, y no sólo el día de San Valentín, es propicio para rodearte de personas que consideres importantes en tu vida. Regala a cada uno una cuota de amor, que siempre viene bien regalar besos y corazones en el día del amor.
Lo más importante de este escrito, es que sepas que eres una persona única y excepcional, que estoy muy feliz y con mucho agradecimiento de que seas parte de mi vida. Y si algún día te sientes tristeza, vuela tu mente a lugares o personas que hicieron vibrar tu corazón, cierra tus ojos y sueña que un mes de febrero, tus sueños por un día se hicieron realidad.
Con cariño,
tu amig@.
